Pablo escogió irse un año muy intenso, lleno de adaptaciones a causa del Covid, pero a pesar de ello consiguió que fuese un año lleno de aventuras, nuevas experiencias y consiguió disfrutarlo como nunca.
Pablo, que cursó 2º de bachillerato (Grade 12) en el distrito escolar de Vernon, en la provincia de British Columbia, nos ha concedido esta entrevista para contarnos cómo fue vivir el año escolar en Canadá durante el curso 2020/21: asignaturas distintas, deportes geniales, amistades nuevas… Mejor que él nos lo cuente, porque a pesar de estos años complicados, nada te debe impedir vivir tu vida a lo grande.
En definitiva ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Te hace crecer mucho como persona, aprender mucho y sin dejar de pasarlo bien. Creas nuevas amistades, vives nuevas experiencias y aún habiendo una pandemia no dejas de hacer cosas. Simplemente yendo al cole ya vives nuevas experiencias, ya que el sistema escolar es completamente diferente. Puede que si no hubiera una pandemia hubiera hecho más actividades pero estoy convencido de que no sería mucho mejor que este año.
A pesar de que hace mucho frío y el transporte no es lo mejor, es un pueblo espectacular y puedes disfrutar mucho si aprovechas todas las oportunidades. Lo bueno es que todas las estaciones del año son perfectas. En invierno se puede esquiar, patinar... Hay mucha nieve y es precioso. Yo me apunté a un club de esquí e hice grandes amigos con los que me lo pasé súper bien haciendo lo que más me gusta: esquiar.
Pero en primavera, que ya hace mejor tiempo y aprovechas para visitar cosas, puedes quedar más con amigos, salir de excursión... Y a principios de verano te pasas casi todo el día en el lago donde hay una playa preciosa con mucho ambiente y muy divertida. En definitiva es una zona fantástica.
La verdad es que recuerdo el primer día perfectamente. El colegio ya lo había visto en fotos así que no me llamó especialmente la atención, ya que tenía muy claro dónde iba. Sí es verdad que impresiona lo grande que es. Lo mejor es hablar con los compañeros porque te ayudan mucho y acabas haciendo muy buenas amistades en el colegio. El primer día lo pasé hablando con los compañeros y conociendo a todos. Pero lo que más me asombró fue la relación con el profesor, ya que se tiene un trato mucho más cercano y amigable lo que acaba haciendo la asignatura divertida e interesante.
Sí, realmente todas son distintas por el método de enseñanza, es mucho más práctico. Por ejemplo, yo hice biología (asignaturas que ya había dado en España) y solo por cómo se enseña parece una asignatura completamente diferente, es mucho más práctica y visual.
Pero sin duda la asignatura más diferente y la que más me gustó fue automoción. Trata sobre arreglar vehículos, entender su funcionamiento, instalar nuevas piezas...
Fue prácticamente todo los primeros días de clase al hablar con mis compañeros que al ser de allí me presentaron a bastante gente. También gracias a Snapchat donde hablabas con amigos, acababas en grupos e ibas conociendo cada vez a más gente.
Estuve esquiando en la estación “Silver Star” a unos 20 minutos de Vernon. El simple hecho de esquiar en Canadá ya es una experiencia inolvidable. Estuve en un club de esquí alpino, bastante competitivo y divertido. Entrenabas con muchos canadienses de la zona y hacías muchas amistades. El conjunto de toda la estación es impresionante (la nieve, las vistas, la longitud y anchura de las pistas, los demás esquiadores...). No sólo aprendes mucho sino que también es una diversión constante.
Como en todas partes, cada familia es diferente. Yo he vivido con dos familias y las dos han estado muy bien. El cambio fue por razones logísticas, pero guardo muy buen recuerdo de ambas. De hecho cuando estuve con la segunda familia seguía quedando y viéndome con la primera.
Realmente me he sentido como uno más de la familia. Me trataban como a un hijo más: ni mejor ni peor. Pero eso también requiere un esfuerzo por tu parte, ya que dependiendo de cómo te impliques con la familia se tiene una experiencia u otra.
Le diría que hiciera lo mismo que ha hecho. No quedarse callado, no perder oportunidades ni decir no a planes, no dejar de hacer amistades e implicarse lo máximo posible en todo. No busques refugio en otros estudiantes internacionales que estén en tu misma situación. Ábrete a los canadienses. Yo fui con esa idea muy clara y al primer mes ya me llamaban para hacer planes.
Por otra parte antes de irme tenía el miedo de “¿Y las amistades que tengo aquí, y mi vida aquí?” pero cuando vuelves te das cuenta de que está casi todo igual como lo dejaste, pero lo que has vivido tú es mucho más de lo que hubieses vivido quedándote ese año aquí.
Hay muchas palabras para definir esta experiencia como inolvidable, impresionante, una aventura... Al estar en otro país estás constantemente viviendo nuevas experiencias y aprendiendo. La mayoría de actividades son nuevas, se podría decir que es una aventura constante.
Al estar “solo” te ayuda a ser una persona más independiente en tu día a día, en el cole, en casa... pero al mismo tiempo eres más abierto. Cada uno decide cómo es su experiencia en base a sus decisiones pero lo que está claro es que vivir un año fuera es algo que no se olvida nunca.
Ir decidido es el mejor consejo que se le puede dar a alguien. No perder oportunidades y acercarse lo máximo posible a los canadienses. Vivir como si fueras uno más de ellos. Es una experiencia única y son oportunidades que no puedes dejar escapar.
Pablo no ha sabido escoger solo una palabra para describir su año escolar en Canadá, ¡por algo será! Es una aventura sin igual, un año que sin duda vas a rememorar el resto de tu vida.
Esperamos que esta entrevista de Pablo os haya ayudado a despejar muchas dudas sobre si estudiar en Canadá es buena decisión, sobre todo en estos tiempos que corren. Pero si tienes más dudas para tu caso en concreto, puedes ponerte en contacto con nosotros y resolveremos todo aquello que te preocupa y te aconsejaremos para tu caso en especial.
¿Nos vemos pronto? ;)