¿Te has preguntado cómo sería vivir una experiencia inolvidable mientras mejoras tu inglés en una ciudad cosmopolita como Toronto? Hoy te traemos la historia de Claudia, una de nuestras estudiantes de Travel & Tuition, que decidió dar el salto y embarcarse en la aventura de estudiar inglés en Canadá.
En esta entrevista, Claudia nos cuenta cómo fue adaptarse a una nueva cultura, sus momentos favoritos en Toronto y cómo este curso de inglés en Canadá transformó no solo su nivel de inglés, sino también su forma de ver el mundo. ¡Acompáñanos a descubrir su increíble experiencia!
Hace unos años, antes de cursar primero de bachiller, tenía previsto ir a estudiar un trimestre escolar a Canadá. Debido al COVID nunca pude ir, y se me quedó ese sueño pendiente. Este verano al fin tuve la posibilidad de irme en agosto a hacer un curso de inglés en Canadá y no me lo pensé dos veces.
No es la primera vez que voy a hacer cursos de idiomas en el extranjero, pero sí la primera que lo hacía en inglés. Siempre le he tenido un poco de respeto y terminaba escogiendo francés. Pero después de esta experiencia, todos los miedos e inseguridades se han ido y me han abierto las puertas a seguir aprendiendo mejor el idioma y todo lo que me da.
Hice el curso de adultos de inglés general en Toronto, que es a partir de los 19 años. Es un salto importante de edad, ya que yo tengo 20 años (era la más pequeña) e iba con gente de 23 hasta 50 años. Para mí eso no fue ningún problema, al contrario, la gente de este curso va a estudiar, se lo toman mucho más en serio y te ayudan muchísimo.
Las clases empiezan a las 8:30 h y terminan a las 13 h. Parecen muchas horas estudiando inglés, pero se pasan muy rápido. Hay dos descansos a lo largo de la mañana y tanto las primeras como las últimas horas son juegos o debates súper divertidos e interactivos. Además, se hacen exámenes cada dos semanas para ver como mejoramos y si podemos subir de nivel.
En cuanto a los profesores, son increíbles, al menos los que tuve yo eran dinámicos y divertidos. Mejoré mucho la expresión y me quité el miedo a hablar en inglés.
Como bien he dicho, al final es el curso de inglés de adultos, por lo tanto, te puedes encontrar de todo. Normalmente, la gente hace estancias largas, de 3, 6 o 12 meses. Eso significa que tienen sus vidas, trabajos y rutinas. Yo por ejemplo solo fui 3 semanas a estudiar inglés en Canadá, por lo que quería hacer cosas todos los días, ver todos los rincones posibles.
Por suerte encontré a mi amiga del viaje que me acompañó todos los días a hacer actividades. Igualmente, en clase hice un montón de amigos y nos íbamos uniendo para hacer planes, a veces éramos 8, otras veces 4… Lo que quiero decir es que puede ser difícil encontrar un grupo de amigos permanente todos los días si es lo que se busca. Pero con los que éramos en clase y todos los amigos que había hecho era muy fácil encontrar a gente para organizar cosas.
Por último, recomiendo hacer las excursiones y actividades que ofrece la escuela porque es otra puerta abierta a conocer a gente de diferentes clases y niveles.
Mi experiencia fue increíble. Están muy acostumbrados a tener estudiantes que van a estudiar inglés en Canadá. En mi caso, la familia de tres hijos, tenía habilitado el sótano como una especie de apartamento con cocina, baño y tres habitaciones para estudiantes. Esto me permitió hacer vida independiente cuando quisiese y unirme a la familia en cualquier momento.
Mi familia era muy agradable y encantadora, pero se me hacía un poco difícil hacer vida con ellos, ya que cenan a las 18 h y yo aún seguía por el centro visitando cosas. Por decir lo negativo, era la distancia de la casa al centro, estaba en una zona residencial bastante buena pero a 1 h del centro en metro.*
*En Toronto, las distancias son tan grandes, y las familias se encuentran en zonas residenciales y no en el centro de la ciudad, lo que hace que los trayectos para moverse sean de hasta 1 hora.
Pues visité todo Toronto, además vi Montreal, Ottawa y Quebec. Pero como experiencias aconsejo ver un partido de béisbol, es increíble el ambiente que se crea, subir a la CN Tower en el atardecer, ir a las cascadas del Niágara, a Canada’s Wonderland y hacer el boat party en Toronto.
Aprendizaje, porque además de todo lo que aprendí del idioma… Me enriquecí no solo de la cultura canadiense sino de la de todos mis compañeros. Aprendí a espabilarme, a funcionar por mí misma, a desenvolverme y a abrirme puertas, nunca se sabe dónde me llevará el futuro, pero no estaría mal en Canadá.
La experiencia de Claudia es solo un ejemplo de cómo estudiar en el extranjero puede transformar tu vida, mejorar tu inglés y abrirte puertas a nuevas oportunidades. Si tú también quieres dar el salto, en nuestro blog encontrarás información detallada sobre cursos de idiomas en el extranjero, destinos increíbles y consejos útiles.
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