¿Cuál es la mejor edad para hacer un año escolar en Canadá?

En muchas ocasiones vemos a nuestros hijos/as muy pequeños aún para tomar la decisión de enviarlos a estudiar durante un tiempo al extranjero. Hemos escuchado tantas veces frases como: aún es muy pequeño para irse solo al extranjero, es muy poco maduro para que se vaya, sólo tiene 13 (14 ó 15) años...

Entonces nos preguntamos, ¿cuál es la mejor edad para que nuestros hijos/as se vayan a estudiar a Canadá?

Cuanto más jóvenes vayan a estudiar al extranjero, mejor.

Tras más de 30 años de experiencia en el sector, siempre hemos pensado que cuanto antes, mejor. Mejor 2º de la ESO que 3º, mejor 3º de la ESO que 4º, mejor 4º de la ESO que 1º de bachillerato, y mejor 1º de bachillerato que 2º. 

¿Por qué? La respuesta es sencilla. Cuanto más jóvenes son menos los problemas que tienen para socializar y adaptarse. Por supuesto, el carácter y el grado de madurez tienen mucho peso en esta cuestión, pero a partir de los 15, 16, ó 17 años, ya en pleno apogeo de su adolescencia, pueden ser más… digamos… ‘complicados’. Ya están completamente inmersos en la famosa edad del pavo y la gestión de su estancia puede contener más retos. Sin embargo, hay muchos otros factores que influyen en este razonamiento. 

En 2º de la ESO, los estudiantes tienen entre 13 y 14 años. 2º de la ESO en Canadá, por ejemplo, es grado 8. En un colegio canadiense en grado 8 no hay prácticamente estudiantes internacionales. Por lo que si tu hijo/a se va a estudiar a Canadá 2º de la ESO hay más posibilidades de que sea el único internacional de su colegio, por lo que podrá hacer una mejor inmersión cultural y relacionarse con más estudiantes nativos.

Es evidente que hay muchos factores que hay que tener en cuenta. Sin embargo, la pregunta clave que un padre o madre ha de hacerse antes de empezar a mover hilos es: ¿quiere mi hijo/a irse a estudiar al extranjero? 

¿Quiere mi hijo/a irse a estudiar a Canadá?

Si el estudiante está decidido, genial. Es el mejor comienzo. Pero a menudo eso puede no ser así y hay muchos estudiantes a los que les invaden los miedos y las dudas. Si tu hijo/a no quiere irse y lo tiene claro, no fuerces la situación, es mejor que no vaya. 

Si por el contrario tiene dudas porque no sabe realmente lo que le espera, tiene miedo porque es tímido, etc. siempre hay opciones para facilitar la decisión: por ejemplo hablar con un antiguo alumno que haya vivido la experiencia y pueda explicarle de primera mano cómo le fue y lo que le aportó en su desarrollo personal. 

En el momento en que se ponen en contacto, todo cambia. Los estudiantes, en su mayoría, se convencen solos. Ponerse en contactos con ex-estudiantes les prepara para tomar una decisión. Su grado de madurez cuando van a estudiar al extranjero aumenta de golpe. Ir a estudiar a Canadá ya sea durante 8 semanas, 12 semanas, un trimestre o un año entero, les ayuda a crecer como personas.

Nuestros chicos crecen muy rápido. Cada estudiante es diferente y su carácter será un factor clave para elegir bien. Si tu hijo tiene 15 años quizás tiene suficiente con una inmersión escolar de un trimestre. Si por el contrario tienes una hija de 13 años, normalmente más dispuestas a la aventura, podrías plantear una estancia de año completo. 

Lo dicho, cada estudiante es un mundo.

Deberás tener en cuenta dos cosas: La predisposición de tu hijo/a y vuestro presupuesto. Evidentemente un programa de 12 semanas no tiene el mismo coste que un trimestre o un curso de año escolar que un programa de año entero. 

Mira la tabla:

¿Qué te recomendamos?

Cuando un estudiante manifiesta reservas para irse un año completo te plantearíamos dos opciones: 

• 12 semanas en 2ª de la ESO
• 12 semanas en 3º de la ESO
• 1 trimestre (4 meses) en 4º de la ESO

Esto se convierte en un año escolar repartido en 3 años, por lo que la madurez del estudiante va cambiando cada año. El idioma del estudiante en su lengua materna evoluciona, y consecuentemente, el inglés que aprende también evoluciona.

Una opción que cada vez adquiere más interés es la posibilidad de que el estudiante se inscriba un trimestre con la opción de quedarse un año completo si está a gusto y quiere quedarse.

Llegado el momento, cuando ya ha permanecido varias semanas y se ha familiarizado con el entorno, el estudiante decide si quiere extender su estancia al año completo y convalidar todo el curso académico.

Es, además, una ocasión perfecta para que sea tu hijo/a quien se involucra de verdad en esta decisión. Le hace ser consciente de que es un partícipe activo, de hecho el primer interesado, en el proyecto de su formación. 

Conclusión

Nadie puede decirte qué edad es la mejor para estudiar en el extranjero, ni por cuánto tiempo. Cada estudiante es diferente y la madurez se adquiere en base a muchos factores. Aún así, si tuviéramos que plantear un momento, el nuestro sería cuanto antes. Dicen que la experiencia es un grado, y mejor adquirirla antes que después.

Al final lo importante es la actitud: las ganas de aprender, mejorar y crecer.