“Vivir en el extranjero te cambia”. Seguramente esto ya lo has oído un montón de veces, pero en este caso, te prometemos que la realidad supera a la ficción. Vivir en el extranjero cambia nuestro paradigma, la forma en la que vemos el mundo. Vivir en el extranjero es mucho más de lo que te puedas imaginar o te puedan contar, ya que cada uno vive su experiencia de forma distinta y solo tú sabrás lo que eso significa y supone para ti.
Pero como dicen, cuando el río suena es que agua lleva, así que fíate de quien te inste a hacerlo y agradece todo lo que te puedan contar. Nosotros te traemos unas pinceladas de lo que ha supuesto para nosotros y de lo que sabemos que ha supuesto para nuestros estudiantes vivir una experiencia en el extranjero. ¡Alerta! Advertimos que te entrarán unas ganas irremediables de viajar ;)
Vayas dónde vayas, vivirás en un país donde la cultura será distinta a la tuya. Quizás te mudes a un país europeo donde su cultura será más parecida a la nuestra, o quizás cruces el charco y te encuentres con un modus operandi totalmente diferente a lo que conoces.
Así que vayas dónde vayas, ya sea aquí al lado o a la otra punta del mundo, tendrás la oportunidad de conocer y explorar una cultura totalmente diferente e incluso las subculturas que puedan haber allí, ya sea por la inmigración, gente que conozcas de otros países, etc.
Sin duda aprenderás mucho de este aspecto pero lo más importante que te llevarás será el saber que existe mucho más mundo de lo que imaginabas. Darte cuenta de que cada país y su gente funciona de manera distinta y aprenderás a convivir con ello, a apreciarlo, a querer probar todo lo nuevo y a abrir la mente, para convertirte en alguien mucho más tolerante.
Nosotros nos quedamos con esta frase: No es dónde, es con quién. Esta premisa contiene mucha realidad, ya que tu viaje nunca sería lo mismo sin las personas que allí conozcas, y aunque al principio puede parecer difícil hacer nuevos amigos, una vez estés allí será demasiado fácil conocer a topo tipo de personas.
En casa, tenemos a nuestros amigos, aquellos con los que hemos crecido o nos hemos juntado en algún momento de la vida, ya sea por ideas afines o porque íbamos al mismo colegio. Sin embargo, cuando te mudes a un nuevo país, tendrás la oportunidad de conocer a gente que esté en el mismo punto que tú y que tenga muchas ganas de ampliar horizontes.
Podrás aprovechar tu viaje para conocer gente local y meterte de lleno en la cultura del país. También encontrarás a un montón de gente viviendo la misma experiencia que tú y te acabarás rodeando de personas de alrededor de todo el globo. Hacer nuevos amigos te ayudará a conocer muchas culturas distintas, pero también te ayudará a ver lo mucho que todos, como seres humanos, tenemos en común.
Todos hemos escuchado infinitas veces el mítico carpe diem pero, ¿has pensado por qué se repite tanto a nuestro alrededor? Porque vivir el momento es un aspecto que muchas veces se nos olvida, sumidos en nuestra rutina diaria olvidamos apreciar los pequeños momentos que hacen especial la vida que tenemos. Planeamos para tener todas nuestras horas ocupadas, y no dejar un atisbo de espacio libre en nuestra cabeza para no tener que pensar demasiado. Esperamos que los días vengan rodados, pero en esa marcha constante nos olvidamos de vivir y experimentar todo el camino que tenemos a nuestro alrededor.
A veces pecamos de terrenales, esperamos a que sucedan las cosas y nos olvidamos de vivir el momento. Olvidamos que si queremos que algo pase, tenemos que hacerlo nosotros. No podemos esperar que haya cambios en nuestra vida si hacemos cada día lo mismo.
Si algo tenemos claro es que, en tu viaje aprenderás a aceptar que lo que nos sucede no siempre se ajusta al plan que teníamos en mente, pero eso no implica un fracaso, si no una oportunidad para sacar el máximo partido de todo lo nuevo y aprender de ello. Acepta lo inesperado, ya que las mejores experiencias suceden cuando dices sí y te lanzas de lleno a todo lo inesperado.
Solo se vive una vez, y de aquí unos años te darás cuenta que te faltan vidas para vivir todo lo que te hubiese gustado, así que al menos disfruta de cada momento y vive al máximo toda oportunidad.
Gran parte de las empresas actuales cuentan cómo gran valor añadido las experiencias internacionales que han vivido los candidatos. Este tipo de experiencias desarrollan en profundidad tus habilidades inter e intrapersonales. Aprendemos a comunicarnos con muchos tipos de gente distinta y a respetar las opiniones divergentes. Por ende, aprendemos a comunicarnos de manera efectiva, a escuchar y a participar activamente cuando emitimos y recibimos un mensaje. Aptitudes muy buscadas por los empleadores y que no se aprenden estudiando en clase.
Además, conocer sitios nuevos, gente muy distinta, culturas diversas, te llenará de inputs súper valiosos que te ayudarán a pensar de forma más creativa y a tener ideas out of the box.
No sabes de lo que eres capaz hasta que lo tienes que hacer. El instinto de supervivencia es una cualidad innata del ser humano, pero que en nuestra vida acomodada no solemos necesitar. En cuanto sales de la zona de confort, te das cuenta de que eres capaz de hacer frente a todo tipo de situaciones y a los retos que se te presenten. Situaciones que nunca hubieras imaginado, y que al principio no sabrás cómo gestionar y las cogerás con algo de miedo. Pero te sorprenderá todo lo que vas a ser capaz de lograr, porque todos sabemos cómo sobrevivir y prosperar, a pesar de que no sea algo que nos han enseñado.
Muchas veces obviamos este punto, porque uno de los motivos por los que salimos al extranjero es precisamente para aprender un idioma. Pero creo que es necesario pararse a analizarlo: Sí, definitivamente volverás dominando mucho mejor un idioma, ya sea el inglés si te vas a países anglosajones, o cualquier otro idioma que vayas a aprender. Te encontrarás en situaciones donde solo habrá gente que hable ese idioma, y no te quedará otra que lanzarte a practicarlo. Al cabo de unas semanas, habrás roto la barrera de la inseguridad y la vergüenza a hablar otro idioma en público y no habrá quien te pare, porque solo querrás practicar y aprender mucho más.
Pero no sólo te beneficiará a la hora de aprender un idioma nuevo, si no que a modo general, tus habilidades comunicativas mejorarán muchísimo. Todo vendrá dado por los inputs anteriores: conocerás mucha gente con la que aprenderás a comunicarte de manera distinta a la que estabas acostumbrado. Conocerás otras culturas y de ellas aprenderás sobre muchos temas que antes no sabías y tendrás la posibilidad de hablar con conocimiento sobre ello en un futuro. En definitiva, mejorarás un idioma y tu conocimiento, lo que hará que para ti se vuelva mucho más fácil comunicar.
Todos los motivos de los que hemos hablado en este artículo, harán que tu confianza se dispare a niveles que ni siquiera conocías. Ya sea en tu año escolar en el extranjero de adolescente, o si decides emigrar una temporada y estudiar y trabajar al extranjero como joven profesional, todas las opciones te ofrecerán algo increíble.
Estamos seguros que aprovecharás ese autoconocimiento y la confianza en ti mismo para hacer que tu experiencia merezca muuucho la pena. Y te darás cuenta de que todo lo que te decían era real. Porque sí, vivir en el extranjero, viajar, conocer y aprender, te cambia la vida por completo.