¿Cómo es vivir con una familia en Canadá?
Son muchas las nuevas experiencias que vas a vivir cuando decides irte a estudiar un año escolar en el extranjero. De hecho ese es uno de los motivos por los que se toma la decisión de viajar, para aprender de todo lo que esta aventura puede ofrecerte. Se espera que los estudiantes internacionales se integren en toda la experiencia como un nativo más, para así poder empaparse de toda la cultura nueva que van a experimentar mediante situaciones cotidianas escolares y domésticas.
Pero sin duda, lo que más marcará tu estancia, será la familia con la que vayas a vivir, es decir, la host family. Es uno de los pilares más importantes en los que se basan los programas académicos en el extranjero. Con la familia pasarás gran parte del tiempo durante la estancia, abrirán las puertas de su hogar para que también formes parte de él y serán el gran apoyo que necesitarás a tu llegada, durante tu estancia y seguirán siéndolo en la distancia durante muchos años más.
Si estás a punto de irte a estudiar un año escolar en Canadá, este post te interesa. Vamos a contarte cómo son las familias canadienses y vamos a darte algunas recomendaciones para que puedas construir una gran experiencia personal en tu familia de acogida. ¡Toma nota!
Marina y Lidia con su hermana y su hermano de acogida.
Las familias canadienses
Canadá es un país formado en gran mayoría por inmigrantes de diferentes partes del mundo que llegaron durante el siglo XIX y XX, es por ello que Canadá cuenta con una gran diversidad y con una sociedad multicultural.
Las familias canadienses son en su mayoría muy acogedoras y hogareñas. Son gente amable, aunque desde nuestro punto de vista pueden resultar un poco más fríos o serios que nosotros. Los españoles estamos acostumbrados a una amabilidad distinta a lo que ellos muestran, somos quizás más cercanos desde el primer momento. Pero hay que saber respetar las distintas costumbres y no por ello juzgar en primera instancia, ya que la sociedad canadiense también es muy cercana y amigable, solo hay que darles más tiempo, hay que generar un ambiente de confianza primero.
También podríamos decir que las familias canadienses son más conservadoras y estrictas con sus tradiciones, costumbres y normas. Les gusta seguir las pautas marcadas, aunque ello no significa que siempre vayan a ser estrictos con todo. Si por algo se caracteriza la sociedad canadiense es por el gran don de estar abiertos al diálogo en todo momento. Nada de discusiones ni medias tintas, todo se puede solucionar hablando. Por ello siempre recomendamos a nuestros estudiantes que cuando tengan dudas o quieran comentar cualquier cosa, vayan directos a hablarlo con tu familia. ¡Todo será mucho más fácil!
Su hospitalidad y su capacidad de integración harán mucho más fácil tu experiencia en Canadá y conseguirás una inmersión muy grata. Te tratarán como a uno más de la familia, tendrás los mismos derechos y los mismos deberes que los demás, por ello también deberás aportar mucho de tu parte, para que ellos sientan que quieres formar parte de su núcleo familiar. Si lo haces, estamos seguros que te sentirás cuidado y arropado por tu familia canadiense.
Núcleos familiares
Alojarse con una familia de acogida será la mejor manera, como estudiante internacional, de integrarse en la cultura canadiense. Una vez formes parte de la familia, pasarás a ser también parte de la comunidad y de sus actividades cotidianas. Como hemos dicho anteriormente, la inmigración forma gran parte de la sociedad canadiense, por ello no existe un modelo estándar de familia canadiense que participe en los programas internacionales, ya que cada una de las familias son diferentes y su núcleo familiar puede ser muy variado. Y hay que dejar claro que no todas las familias van a estar compuestas de padre, madre e hij@s, y no va a suponer nada malo en ello.
Muchas serán así, otras serán familias monoparentales o una pareja de jóvenes sin hijos, otras serán una pareja de gente mayor con hijos mayores fuera de casa; en otros casos serán familias de distintos orígenes, o compuestas por dos madres, etc.
Muchas tienen hijos de edad parecida al estudiante que alojan, pero quizás otras tienen hijos más pequeños o mayores a él. También es posible que haya otro estudiante internacional en la familia, con quién poder conectar como hermanos de acogida. En este caso, el estudiante siempre será de un país que no sea hispanohablante.
Pero hay ciertos aspectos que todas las familias de acogida cumplen de la misma manera: proporcionarán un ambiente agradable donde el estudiante que alojan se sienta cómodo y seguro y le darán apoyo en todo momento. Además, vivirán en un entorno donde única y exclusivamente se hablará inglés, para así conseguir la inmersión lingüística completa que se espera con esta experiencia.
Martín y Clara con sus madres de acogida.
Asignación de la familia
Una de las cosas que te pediremos después de hacer la inscripción, será una carta donde nos cuentes cuales son tus aficiones, tus gustos, si tienes alergias, si te gustan los animales o no (las familias canadienses suelen ser grandes amantes de los animales domésticos), etc. De esta manera sabremos más sobre ti y se podrá ser más precisos en la búsqueda de tu familia.
Todas las familias de acogida que forman parte del programa de internacionales han pasado una serie de pruebas revisadas por l@s coordinador@s de familias del distrito escolar, conforme la casa está limpia, dispone del espacio adecuado para hospedar a un estudiante internacional (siempre tendrán una habitación privada para el estudiante), es una familia con ganas de aprender de nuevas culturas, dispone de un historial limpio de antecedentes penales, y muchas más.
Antes de viajar a Canadá se te asignará una familia de acogida. Se te proporcionará los datos de la familia para que puedas programar una videollamada para tener una primera toma de contacto y, sobre todo…¡ver las caras por primera vez de tu nueva familia en Canadá!
Esta primera impresión puede ser muy buena o quizás un poco cortada debido a la vergüenza de conocerlos. Pero es muy importante que no se juzgue de entrada en esa primera toma de contacto, ya que unos pocos emails o una llamada no significa que ya os conozcáis de verdad. Una vez allí descubrirás muchas cosas de ellos y todo irá sobre ruedas. Recuerda, como alguien dijo una vez: “Grandes amores se odiaron a primera vista”.
Tanto das, tanto recibes
Como os contamos en nuestro artículo de blog sobre Cómo tener éxito con tu familia de acogida, hay ciertos aspectos que debes tener presente a la hora de convivir con una familia de acogida, sobretodo al principio, cuando todo es nuevo y os tenéis que dejar conocer y al mismo tiempo, tendréis que hacer un esfuerzo para intentar conocer a vuestra familia canadiense. Estamos seguros que la familia será un punto imprescindible en vuestra vida y que los vais a echar mucho de menos a vuestro regreso, pero vamos a repasar ciertos aspectos para que todo vaya como la seda:
La confianza. Algo que se tarda un tiempo en conseguir y que se puede perder en un visto y no visto. Es en lo que se basará tu relación con la familia. Al fin y al cabo ellos abren las puertas de su casa a alguien que no conocen y deberás ganarte su confianza y ellos la tuya. ¿Cómo? Pues aquí te dejamos varios ejemplos.
- Una vez allí, harás muchos planes con la familia, pero también con tus nuevas amigas y amigos. Te lo pasarás genial, pero es importante que informes de todo a tu familia, que los avises con tiempo y que siempre sepan dónde estás. Ellos serán responsables de ti allí, así que para cualquier cosa deberán poder contactar contigo.
- Deberás pedir permiso para todo aquello que salga de lo convencional o del día a día. No te van a impedir que dejes de hacer cosas o que no traigas a amig@s a casa, pero es importante que antes de hacerlo les preguntes. Para ellos representará una muestra de respeto y confianza muy importante.
Socializa y se proactiv@. Muy importante. No te quedes encerrado en la habitación, comunícate con ellos, interésate por cómo le ha ido el día a la familia, propón planes para hacer en familia. ¡No vas a conseguir que confíen en ti si no hablas con ellos o si no te ven el pelo!
Mar, su familia de acogida y amigos.
La experiencia de estudiar un año de ESO o bachillerato en Canadá te aportará infinidad de cosas buenas. No solo vas a aprender inglés, si no que vas a conocer e integrarte en otra cultura. En la familia, llevarás una vida distinta, con costumbres distintas y aprenderás a ver el mundo con otros ojos, ganarás en perspectiva. Verás que no solo hay una manera de hacer las cosas, que existen más de las que ya conoces. Todo lo que puedas aprender te enriquecerá y cambiará el rumbo de tu vida.
También tendrás la súper oportunidad de compartir tu cultura y tus costumbres con los demás. De compartir historias, tradiciones y el modus operandi de tu cultura con la familia candiense y tus amigos de allí, que les encantará conocer y escuchar sobre algo que ellos no conocen.
¿Estás list@ para esta experiencia? ¡Solo disponible para mentes abiertas y aventureras!
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